-Los dejan primero pasar hambre, unos días, para que se limpien de lo verde y luego los guisan con el arroz. ¡Vosotros no coméis esas cosas!
Le gusta, le anima, la idea de la recolecta y la caza furtiva. Recoger lo que nos da la tierra o el agua. Espárragos, berros, collejas, cardillos, manzanilla, algún pájaro, cangrejos de río (cuando había), truchas…
-¡Caracoles! Eso era lo más rico.