-Pablo, ¿no tienes calor con tanta ropa? ¡Quítate la cazadora por lo menos!
-Tú qué sabrás lo que es tener frío en invierno…
-Si ya estamos en primavera
-¡Primaveeeera! ¿De qué mes?
-De marzo
-Uy marzo, en cuanto te descuidas te hiela los brotes y te mata los corderos ¿Tú no sabes eso?
-No, cuéntamelo
-Pues un invierno que había sío muy duro, un pastor le pidió a Marzo que no le matará ningún cordero, que ya se los había apalabrao al carnicero y que a cambioooo le daba uno, el más hermoso… Así que se puso a hacer buen tiempo y los corderos se criaban que daba gusto verlos y al pastor le daba pena deshacerse de uno, como había acordao… Así que se presentó Marzo, tres días antes de irse y le pidió lo suyo y el pastor dijo que ni hablar, que pa los tres días que quedaban, ya no le iba a poder hacer daño ninguno…y dice Marzo, ¡Ah, con que esas tenemos! Pues con los tres días que me quedan a mí y tres que le pido a mi amigo Abril, te voy a dejar sin redil…Y eso pasó, se puso a helar y a hacer mal aire y se quedó el pastor sin ningún cordero,¡ pa que veas!
P.D. a continuación, en lugar de dibujos de corderos, pongo una foto antigua de ajetes en flor a petición de Sari Carmen
y otras más del huerto, dónde estamos hoy, quitando malas yerbas, en un día primaveral de los buenos
Amapolas, que se han salvado de la azada
Lavanda
Pasiflora
Acelgas
Guisantes
Dinosaurio acercándose a un brote de limón
Romero y lirios