A vueltas con una bicicleta

Hace unos días, en la sala de espera del consultorio médico, le conté a Pablo (en voz alta y repitiendo algunos pasajes que no entendía/oía bien) una historia que había leído en el blog de luna ; trata de un abuelo que le tiene manía a su nieto y le deja de herencia una bicicleta rota (el cuento completo lo veréis pinchando en el enlace). Naturalmente me oyeron todos los habitantes de la sala y eso despertó una tertulia/polémica en idiomas y traducciones varias, que nos mantuvo entretenidos hasta que nos nombraron para entrar a consulta. Aquí os dejo dicho que Pablo dio aprobado en el examen, que nos recetaron pañales (Yo no sabía que los cubría la Seguridad Social) y que nos dieron algunos consejos (bastante razonables) sobre alimentación ancianil. De regreso a casa y tomándose su bebida energética (preparado para deportistas marca ACME)

-Y esa bicicleta que dices que le ha quedao tan rota a ese muchacho… ¿No podríamos llegarnos hasta Ondara y a ver si nos dicen allí en la tienda si tiene arreglo y lo que costaría? Porque a lo mejor, como a mí me conocen…osea que lo hacen por cosa de poco

Por contentar al muchacho, digo…Si a mí se me daban muy bien los arreglos, porque yo iba y volvía a Talavera y ¡bien cargao de cosas! Y más de una vez tuve que parar y arreglar, que sí el manillar, que sí una ruedaaa… Pero yaaa…con esta temblera de manos que tengo ¿Por qué me habrá dao a mí este reilor?

-Es por el Parkinson

-¡Qué jodío el parkin ese! Pues yo iba a Talavera y volvía tan deprisa como Bahamontes -se ríe- ¿A qué tú no le conoces? El Águila de Toledo le decían

Y era tan rápido subiendo montes, que cuando fue a correr a la parte de Francia y llegó el primero y ¡bien alante! a lo más arriba…de un señor monte sería, porque allí lo calzan tó más grande -se ríe- Pues y queee ¡se puso a comer helaos mientras los otros le daban alcance!

45 comentarios en “A vueltas con una bicicleta

  1. Luna Paniagua

    Justo me estuve «documentando» sobre Bahamontes para este relato, aunque al final no utilicé nada. Yo tenía oída la anécdota del helado y la he leído contada por él. El caso es que llegó arriba y algo le había pasado a su bicicleta, tenía que esperar al coche de apoyo y como hacía tanto calor se comió un helado mientras esperaba. Los espectadores eran franceses y no pudo hacerles entender la razón de su espera y lo tomaron por un acto de soberbia.
    Le ha dado penita a Pablo mi pobre rapaz, si tuviera al abuelo delante lo ponía firme :).
    Dibujas muy rápido, ¿no?
    Abrazotes

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    1. noteclavesilustracion Autor

      Pablo también lo cuenta como chulería, lo del helado, dice algo así como en esa época estaban tan «avergonzados»(algunos más que otros 😉) de ser españoles, este superhéroe ciclista, les subió un poco el orgullo y la autoestima. Pero sí, se ha quedado con lo del pobre muchacho sin bici

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  2. Carlos Montalleri

    Conversaciones sencillas cargadas de sentido y de sentimiento. Leí el post de Luna, vaya abuelo… y me encanta que Pablo esté dispuesto a «arreglar» esa bici que se le desmantela al chico. Por cierto, menciona Ondara, que curioso, pasé por allí hace un par de semanas, cerquita de Denia y Jávea. Abrazos a ambos y enhorabuena por los resultados médicos.

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  3. tecuentodeviajes

    Conocía a Bahamontes pero no la anécdota fresquita del helado, ni sus entrelíneas 😉
    Mi padre también me contaba sus anécdotas sobre ruedas 🙂 me decía que cuando iba al campo a «pretender» a mi futura madre 🙂 a veces pinchaba y rellenaba las ruedas con hojas de eucaliptos 😮 para hacer el apaño hasta poder arreglarla. Seguro que don Pablo, cuando arreglaba su bici, también habrá tenido muchos momentos ciclo Mac Giver 😀
    Preciosa y tierna historia. Me alegra que haya pasado el examen médico. Como mola la camiseta 😀 la del retrato de nuestro querido don Pablo mola más que ninguna 😀 chulichuli 😀
    Abrazos enormes y dominicales a repartir con nuestro tierno don Pablo. XXXOOO

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  4. noteclavesilustracion Autor

    Estoy preparando una serie(de camisetas) para cuando hagamos el mercadillo juntas: «que nos las quitan de las manos, oiga!»
    Y oye, qué preciosidad lo de» relleno 🚵de hojas de eucalipto», también podría ser la presentación de un plato de nouvelle cuisine😉
    Y esos abrazos vengan, querida Cristina 😊😙

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    1. noteclavesilustracion Autor

      Pues Laura, tú eres la que más tiempo llevas mirando en estos dibujos/historietas de Pablo. ¿Recuerdas lo que me preguntaste, y yo le transmití, sobre si eran santos o estampas las ilustraciones de los libros? Pues eso, que has ido viendo alguna mejora, después de rellenar varias libretas…Y que me gusta mucho esa sonrisa que pones. Y te animo a dibujar y escribir (que seguro ya lo estás haciendo fuera de estas redes)
      Un montón de besos y cariños

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  5. justin dbf

    Con gusto hubiera participado de ese interesante Consultorio Forum.
    Al Consultorio donde yo voy a renovar la receta electrónica el paisaje es más bien de silencios.
    He leído el relato de Luna, y éste remake tuyo. Ambos tiernos.
    Desde luego, el Abuelo se llevó con su mortaja la bici. Y le dejó al Nieto un montón de piezas oxidadas.
    Un regalo es para el momento, luego ya es un despojo. No vale lo de… “lo hago por tu bien…”
    (es mi opinión)
    Ah! y me alegro salieras del médico con la receta incluyendo ya los pañales. Unos artilugios muy necesarios. Siendo así que entran por la Seg.Social, ya no guardaré en el altillo del armario, para mi mañana, los que mi nieta ha dejado de usar…Los donaré.
    Un abrazo.

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    1. noteclavesilustracion Autor

      Pues sí Justin, esta sala de espera suele ser muy participativa, aunque es un poco «Babel» pero siempre nos apañamos, yo no sé cómo, para entendernos. Pues sí, entran en la Seguridad Social y es un alivio para las pequeñas economías familiares (supongo que dependerá de la cuantía de las pensiones, la de Pablo es el mínimo)
      Un abrazo ☺️

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  6. laacantha

    Envejecer es como escalar una gran montaña; mientras se sube las fuerzas disminuyen, pero la mirada es más libre, la vista más amplia y serena. Ingrid Bergman

    Muy buena entrada, sobre todo lo de ayudar al chico con la bicicleta rota. Ánimo para los dos. Un abrazo.

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  7. whatgoesaround

    Una gran y hermosa continuación al relato de Luna. Como ha dicho alguien, Pablo no puede ser más majo, intentando ayudar a ese pobre rapaz discriminado por su abuelo. Enormes los dibujos y molan un montón las camisetas, las de anteriores entradas también. Cómo me he reído con ese dibujo de la bicicleta con las ruedas totalmente abolladas y deformes.
    Muy grande también lo de «el Parkin ese».
    Conocía a Bahamontes de referencias, es verdad que fue muy grande. Lo del helado no lo sabía. Tiene toda la razón del mundo Laura Antolín: esto ya va siendo una novela gráfica de tomo y lomo.
    Ánimos para los dos.

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  8. Alfonso Cebrián

    Qué buena la anécdota que cuenta Pablo sobre Fede -me tomo la libertad de llamarlo así-; aun siendo cierta con matices, es ya pura leyenda. Ahora Fede escalará de por vida por el Miradero. Al Presidente de la Comunidad Autónoma le dijo en la inauguración de la escultura que menos mal que habían llegado a tiempo, que si esperan un poco más… Noventa años y tan tieso.
    Poco a poco, de vuelta. Un abrazo

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  9. Estrella RF

    ¡Pero qué grande es don Pablo! Como me consta que es una buenísima persona (sus ocurrencias traslucen una gran ternura y humanidad) está preocupado y me imagino que irritado por ese abuelo tan cruel que fue capaz de morirse tras hacer la jugarreta más ruin a su nieto. Tendrás que contarle que ya la tiene arreglada pues si no, no va a dormir a gusto…
    Muy animada la tertulia del consultorio, yo creo que estamos deseando hablar con los demás, lo que pasa es que, por lo general, reina el silencio y es muy difícil que alguien rompa el fuego de la conversación. No es como en los trenes de antaño, cuando se sacaba la hogaza de pan y el chorizo de pueblo y se compartía con todo el vagón mientras todo el mundo hablaba de sus cosas con el viajero de al lado, que habían conocido ese mismo día… Eran bonitos aquellos viajes. Cuando, después de muchos años, volví a subir al tren, se me cayó con estrépito el mito que tenía guardado en mi memoria.
    Un abrazo para los dos.

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    1. noteclavesilustracion Autor

      Sí, ahora sí te subes al tren y quieres entablar conversación, te toman por loco; eso sí logras que alguien levante la vista del móvil 😁
      La tertulia/polémica de la sala de espera, sobre educación y relaciones intergeneracionales estuvo muy interesante. Me hubiera gustado teneros allí para opinar.
      Un gran abrazo querida Estrella

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