Según el cristal por el que mira

51 respuestas

Entro en su cuarto a ver si quiere algo

-Pablo, ¿estás viendo las Fallas?

-A ver, qué otra cosa voy a hacer…Antes se celebraba mucho también aquí…el ayuntamiento compraba petardos y tracas y ponían un montón en la plaza y allí tó el que se arrimaba podía explotar algo…porque los de aquí están siempre dispuestos pa tirar cohetes…un día salió volando uno por los aires -se ríe- pero no sé hizo ná, otros han tenío peor suerte y se han quedao sin algún deo, pero disfrutaaaan, ¡uy, tú no sabes!…Y ya por últimas no sé si lo prohibieron o sólo los dejan manejarlo a los que son profesionales…es que pa tó hay que valer, cualquier cosa que hagas hay que saber ¡y no vale con querer! ¡Ay! Yo yaaa…aunque quisiera no valgo pa ná; así que me siento aquí en mi tumbona, en el puesto de observación…¡Mira!, por allí sale Pepita, tan arreglá, que irá a misa, ¡a ver!

Y por ese otro cristaaal -mira hacia la televisión- las fiestas esas y el bullicio de gente…Y yo aquí, a resguardo del aire

51 comentarios en “Según el cristal por el que mira”

  1. tecuentodeviajes

    Hoy huele a chamusquina que diría mi abuela 😀 😉 No sé como lo haces o lo hacéis 😉 que te leo y SIEMPRE SIEMPRE me llegas/is al alma. Hoy la nostalgia de Pablo me atraviesa y me remueve las mías, tus dibujos me enamoran una y otra vez …y a esa Pepita arreglada hoy hay que felicitarla 😉 . Dos abrazos enormes y calentitos…que vuelve el frío, y la lluvia… este rinconcito del Sur del Sur comienza a parecerse a Mordor 😀 😮 😀 Muchos besitos y gracias por tanta humanidad y ternura.

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  6. lunapaniagua

    Solo que sus cristales son reales… Mira que me han invitado mis primos a fallas, y no he ido nunca, ni pienso, me dan pánico los petardos, algo me pasaría en otra vida porque de siempre. Me da rabia porque tiene que ser digno de ver.
    Dile a Pablo que sí que sirve para algo, fíjate a cuántos nos encantan sus (vuestras) historias.
    Abrazotes 🙂

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  9. whatgoesaround

    Dibujazos brutales. Esa pantalla sí que es FULL HD y lo demás son tonterías. Ay, y cómo me ha hecho reír tu ilustración de Pepita, la veo digna de un Mortadelo y Filemón. A mí también me incomodan los petardos, aunque no me dan miedo sí que me asustan si explotan tan cerca, no lo aguanto.

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  11. inspectordisaster

    Cossño, note, pues aquí te lo ibas a pasar en grande rememorando viejos tiempos porque tenemos toooodos los tebeos de Ibañez. Pues yo, la verdad, me imagino a Pablo sentado entre los dos cristales —ventana y tele— haciendo sus comentarios certeros como un youtuber de la tercera edad ante su doble pantalla. Yo que tú ya le estaría cambiando ese silloncito orejero por una auténtica «Silla Gamer», de esas ergonómicas como de Fórmula 1, como se merece. Me encantan tus dibujos, me encanta Pablo y ¡no soporto las tracas! Un achuchón.

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    1. noteclavesilustracion Autor

      Ibáñez es uno de mis dioses! Y tienes raz(i)ón en lo de Pablo, a mi también me dan ganas de hacerle youtuber, grabando sus cantares y sus disquisiciones sobre unas y otras cosas (cuando está, porque ¡Ay amiga mía! cada vez va teniendo más borrados de memoria y cortocircuitos varios😔)
      P.D. y no sé cómo no soportas las tracas si tú ¡eres «la traca»! Ven que te achuche y te rebese 😍😘😘

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  14. Magdalena

    Hola, querido note; Hoy he tenido un día muy ajetreado y todavía no te había leído.La simultaneidad de tareas que desempeñamos las amas de casa nos dejan poco espacio para otras cosas más interesantes, como por ejemplo: leerte y admirar tus bonitas ilustraciones.
    En Palmeira se celebran también las fiestas con mucho producto pirotécnico. Un día que yo salía para una de las procesiones importantes del pueblo, una vecina que estaba sorda como una tapia (q.e.d.) al escuchar el sonido de una bomba de palenque se me quedó mirando y algo dijo entre dientes que yo no conseguí descifrar. Estaba a la puerta de casa y se metió remosmando para dentro. Luego intuí que ella debió de pensar que lo que había escuchado al pasar mi menda por su lado, era un complemento nitrogenado con estruendo desmedido. Tuve que hablar con su hija para deshacer el entuerto y… pienso que me creyó.
    Ahora me causa hilaridad pero, te aseguro que lo pasé mal.
    Besiños palmeiráns, apreciado note.

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    1. noteclavesilustracion Autor

      Ay Magdalena, qué maja (y qué maga también) eres! Me he reído un montón con tu anécdota y con la palabreja «remosmando», que no había oído nunca, se lo he preguntado al señor Google y me ha contestado en japonés 😂😂…me figuro que significa *murmurando
      Te envío mis cariños 😊😗

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  15. Estrella RF

    ¡Qué sabiduría rezuman siempre los recuerdos de Pablo! Imagino que recuerda con la nostalgia de la juventud perdida, pero es tan tierno… me encanta.
    Y tus dibujos son siempre muy expresivos, tienes un don especial, felicidades.
    Un abrazo.

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  16. saricarmen

    Los dibujos, los recuerdos de Pablo y los comentarios, ¡son todo un deleite! ¡Es que me he reído mucho con los recuerdos que hace Magdalena!😂😂😂😂😂 Y justo Pablo tuvo que ver a la Pepita y le entró la curiosidá…
    ¡Abrazos, muchos abrazos para todos, amigos!😊😊😊

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  18. Magdalena

    Querido Note, efectivamente, «remosmando » tiene el significado que tú has apercibido: murmurando, pero negativamente. Ya ves que el señor Google no es capaz de resolverlo todo, y eso que dicen que la informática es el Dios del siglo XXI porque ha sustituido el Portal de Belén con sus adoradores, por los portales en Internet, con sus servidores.
    Bueno, muchas cosas, sí, nos las resuelve.
    Besiños palmeiráns para todo el grupo.
    P.D. Ahora sé que no eres japonés.

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  22. palmeiralibre

    Con las historias de Pablo siempre acabo evocando momentos de mi juventud que están ahí esperando que alguien los despierte. Se ve que en los pueblos la historia se repite. Los cohetes de las fiestas… Pues no conozco a pocos mancos -«tocos», se les llama en Galicia-, sin dedos y hasta sin manos, a causa de algún cohete encontrado sin explotar en la playa. Que se lo digan a un tío mío médico -pacífico por naturaleza- que en las madrugadas de verano cambiaba de carácter a causa de los continuos madrugones ocasionados casi siempre por jóvenes imprudentes. Para colmo de males, a falta de medios en aquella época, no quedaba otra que trasladar al herido -o heridos- al hospital de Santiago que quedaba a unos setenta kilómetros de distancia. Sentía verdadera aversión hacia los cohetes.
    Gracias a Magdalena acabo da aprender una nueva palabra: siempre dije «rosmar» (murmurar). He ido al diccionario a comprobar cuál era la correcta y veo que las dos son ´validas. Me alegro. Conociendo a Magdalena suponía la mía equivocada.
    Ay, que cada día me voy acercando más a Pablo…Lo digo por las batallitas. Pero las suyas están contadas con un gracejo que ya quisiera para mí. Me encantan. Y las ilustraciones en alza. Menos mal que el firmamento es infinito.
    Un abrazo grandíiiiisimo.

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  23. noteclavesilustracion Autor

    ¡Mira quién habla de gracejo! Contar historias se te da de maravilla, Palmeiriña un abrazo gordo y mil gracias por dejar aquí tus recuerdos que nos demuestran que «en todos sitios cuecen habas» y tiran cohetes y se quedan «tocos»(otra palabra nueva para mi y atractiva)😊😗😗

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