felices penurias

Hoy, arropado con la manta, comiendo unas natillas, con un desánimo que le deja «el cuerpo frío y la cabeza caliente»img_20161112_203728960.jpg

-(…) es un frío por dentro lo que tengo, una cosa difícil de decir…

-¿Así te arropabas con la manta cuando ibais al campo?

-¡La manta no la soltaba!- empieza a hablar como enfadado de que le pregunte, pero poco a poco se va animando y su cabeza se va hacia esos días de «felices» penurias- Valía hasta de bolsa, en la parte del «doble» llevaba el cacho pan y las sardinas que me echaba mi madre de merienda….y valía para hacer sombra cuando hacía falta…y en poniendo unas pajas debajo, ya tenías la cama – se ríe- Me has hecho acordarme de una vez, yendo con mi primo ya muy tarde a guardar la viña…que veníamos del baile, ya de noche, y cómo iría de cansao que dice, «yo me quedaba aquí mismo», y se echó sobre un risco…Yo me preparé bien la cama y me dormí enseguida y cuando «disperté» porque amanecía, mi primo no se había movido de según se había quedao, así tumbao y  ¡sin molestarle las piedras debajo! -se ríe y se aparta la manta- y con la manta en el hombro, sin arroparse ni naaaa…

-¿Ya no tienes frío?

-No, ¡ya se me ha quitao!- y sigue hablando de su primo y de cosas que me cuenta tantas veces…

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s